Jueves, 13 de Noviembre de 2025

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Paula M. García
Sábado, 04 de Septiembre de 2021

Burkini show

El lenguaje de los símbolos nos ha llevado a situaciones grotescas. Tan es así que ese 17 de agosto declarado "Día del Burkini" en el Parque Marítimo del Mediterráneo con su componente islámico reivindicativo, ha supuesto un punto de inflexión en la anecdótica forma de baño elevado en este caso a la categoría de conflicto. Una amiga musulmana recuerdo que, tras sus cinco oraciones diarias, con la reglamentaria ducha y pestillo confinatorio interior para que sus esposo no la viera desnuda en ese trance purificador, acabado el trámite, se ponía el tanga y mostraba su cuerpo serrano en la Costa del Sol. Debe ser que, las creencias -como la democracia en muchísimos casos-, se hunden en el Estrecho. Por eso, me resultó patético ese grito "liberalizador" a nivel ideológico (o religioso), que no coherente con pensamientos occidentales, cuando se convocó por redes sociales y se realizó "de facto" un baño antihigiénico para muchos y con indumentaria homologada para otras en un lugar público y emblemático.

 

Contrasta que en tiempos de liberación y pretendida libertad aún haya quienes hacen su interpretación particular para exponer usos y costumbres islámicas en materia de derechos, con tanto feminismo e ideología de izquierdas en las que se apoyan para otros menesteres menos prosaicos y más económicos, donde el socialcomunismo campa a sus anchas, "hijos" de aquél movimiento hippie de "haz el amor y no la guerra" o de los amantes del naturismo liberalizador de mente y cuerpo que llevan su desnudez a gala en "Costa Natura" de Estepona u otros lugares donde solazarse en esta sociedad en la que el culto al cuerpo con esos "metrosexuales" presumiendo de cuerpo forjado en gimnasio es todo un alarde de salud y belleza.

 

El Burkini ha resultado polémico en muchos lugares. Francia, tan admirada por los marroquíes como referente de progreso, lo puso en cuarentena al igual que el hiyab. En Granada, otra cuna de Al-Andalus, ha sucedido otro tanto con el Burkini. Y es curioso que surgiera de Australia, donde la natación es un símbolo mundial de proyección exitosa y no precisamente en Burkini. Son las contradicciones de este mundo tan miserable como incoherente, donde cualquier crítica se etiqueta como "fobia": Islamofobia, burkinofobia, MENAfobia...obviándose la cristianofobia, la Voxfobia o, incluso, la fobia a la ultraderecha ( la ultraizquierda comunista parece no existir en el concierto político nacional), en una tendencia de descalificación promovida por los denominados "progres" que adaptan a sus intereses el "etiquetado" correspondiente y nunca critican comportamientos retrógrados depende de a quienes afecten.

 

De la "Libertad sin ira" de Jarcha en el preludio democrático de esta España nuestra a la que cantaba Cecilia al mensaje electoral de Isabel Díaz Ayuso "o socialismo o libertad" e incluso "comunismo o libertad", ha llovido mucho, electoral y socialmente. Quién sabe si ahora "El último tango en París" al que se acudía al Perpiñan francés para visionarlo en la clandestinidad o el clásico "destape" del cine español serían hoy motivo de censura; eso sí, democrática. No se olvide que estamos bajo una democracia vigilada que es tanto como aludir a una dictadura "blanqueada", donde nos dicen cuándo hemos de salir de casa, eso sí, por interés sanitario o a qué hora hemos de recogernos en casa. Recuerden que en la época franquista, las chicas a las diez habían de estar en casa para proteger su virtud, aunque de cinco a siete de la tarde, se decía que "eran las horas malas de los hombres buenos" y no había franquista de pro que se preciara que no tuviera una amiga a la que le ponía un piso, pese a ir con la propia mujer "la santa" a misa de doce todos los domingos.

 

Aludo a la hipocresía patria tradicional para referirme también a ese intento reivindicativo cínico del uso de Burkini que es bañarse vestido en esta época de pandemia y tantísimo calor, donde nos reiteran que, cuidado con nuestra indumentaria por si está contaminada del COVID o nos imponen la mascarilla protectora en múltiples casos.

 

A las zonas de baño no se debería llevar la creencia religiosa de cada uno porque un "capillitas" podría considerar ofensivo y  pecaminoso (cuando no escándalo público) un tanga primoroso al más puro estilo cubano con los glúteos a la vista y sin cubrir de miradas pecaminosas.

 

Estamos alcanzando unos niveles de pseudoescándalos retrógrados y unos niveles de hipersensibilidad cínica incomprensibles, lo que me lleva a una frase muy utilizada en el lenguaje "caballa" para demostrar que los más escandalizados son los peores: "Santigüate coñate que no pecate".

 

Al paso que vamos, si el Burkini es motivo de conflicto en una sociedad occidental del siglo XXI, habrá que incorporar las costumbres afganas con urgencia a la vista de tan multitudinaria acogida que dispensamos para unir a MENAS, subsaharianos, pakistaníes y sudamericanos. Tendemos al mestizaje total, a la pérdida de identidad española y occidental con el adoctrinamiento socialcomunista poniéndonos la proa bajo el señuelo de la tolerancia que nos lleva a "comulgar con ruedas de molino". Ya quedamos ojipláticos con Manuel Hernández y su sentido familiar de acogida a MENAS en la campaña electoral de 2.019 de cuya iniciativa él mismo no ha dado señales de vida ni ejemplo en estos momentos en los que es preciso "arrimar el hombro" ¿no? Su quehacer es el botafumeiro para Sánchez el "cumplidor" y la situación de las barriadas que tanto preocupan a su compinche Juan Gutiérrez. ¡Vaya oposición que hacen de risa!

 

Acabo con una frase de Brachelet: "Cada día puede ser peor". No perdamos la esperanza de que así sea. La clara vocación ideológica bajo eufemismos, la desmemoria histórica como "saber básico" resulta una obviedad tan evidente porque parafraseando a Kennedy "la libertad sin educación es siempre un peligro y la educación sin libertad es vana".

La opinión de Ceuta Ahora se refleja únicamente en sus editoriales. La libertad de expresión, la libertad en general, es una máxima de filosofía de este medio que puede compartir o no las opiniones de sus articulistas

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