El caso de la violencia con la que se está cebando el odio hacia lo que representa VOX, también ha tenido un capítulo en Ceuta. Más allá de las duras críticas más la retahía de insultos que reciben, también se ha pasado a los hechos con el ataque sufrido en su sede ceutí, en la céntrica calle del Paseo de las Palmeras, con la consecuencia de la fractura de uno de los ventanales.

La formación ha denunciado el aumento de los ataques verbales que, en estos últimos días, va incrementándose y que, provienen -aseguran- de la extrema izquierda radical, cuyo fanatismo pone en peligro el proceso democrático que se avecina.

VOX asegura que es la respuesta al "poco tiempo que les queda de chiringuitos", dado el crecimiento en intención de voto, que se vislumbra a favor de la formación. por las encuestas y los trabajos demoscópicos realizados en la ciudad autónoma.