
El problema es que en España no se traduce bien el árabe
Hubo un tiempo, allá por los abriles del año 2007, en el que Europa miraba con preocupación la frontera de Ceuta con Marruecos a causa de que tanto la agencia de noticias española EFE como la francesa AFP, junto a otros medios internacionales, habían calificado de “estado de alerta extrema” la situación del país magrebí, después de conocerse una amenaza terrorista sobre Rabat. Ante eso, el entonces ministro de Comunicación del Gobierno de Marruecos, Nabil Bel Abdelá, hizo un rotundo desmentido, ya que en su opinión las fuerzas de seguridad únicamente estaban en “vigilancia” y los periodistas “habían traducido mal el árabe”. O sea, algo así como que los sajafis isbani eran inahum la yaerifun, vamos, que ni idea desde el dariya al farsi, pasando por el tamazigh, que lo traducimos todo muy mal.
Yo no voy a desmentir las palabras del entonces ministro de Comunicación marroquí, porque la razón puede que siempre esté repartida, pero me van a permitir las autoridades en comunicación actuales del gobierno magrebí que les diga que tengo la sensación de que a veces a ellos parece que España les habla en chino mandarín. Es imposible que tantas veces no lleguen a entender nada.
Marruecos debería estar menos tenso y tomar mas té con las autoridades españolas. La historia lo justificaría porque, si es por el lenguaje, España podría recurrir al rico idioma de Cervantes y puede que les guste la obra Las mocedades del Cid, de Don Guillén de Castro. Una obra teatral en la que Rodrigo dice:
Honra, valor, fuerza y vida
todo es tuyo, Gran Fernando,
pues siempre de la cabeza baja el vigor a la mano.
Y así te ofrezco a los pies esas banderas que arrastro,
esos moros que cautivo
y esos haberes que gano.
España y Marruecos, Marruecos y España, deberían evitar que se diesen situaciones como la que se ha dado hoy en la frontera de Ceuta en la que cientos de niños (MENA) quedan en situación de desamparo y la ciudad, colapsada. Creo que nuestro padre común Abraham estará muy enfadado, y no hay nada, nada, que justifique que Marruecos tenga una frontera tan permeable.
Salam a lakum
La opinión de Ceuta Ahora se refleja únicamente en sus editoriales. La libertad de expresión, la libertad en general, es una máxima de filosofía de este medio que puede compartir o no las opiniones de sus articulistas
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.89