La "kale berroka" local, el terrorismo callejero que calificó el consejero de Medio Ambiente y Servicios Urbanos, la guerrilla callejera, el vandalismo que otros califican, la delincuencia nocturna en general, es responsabilidad absoluta de la ineptitud de la socialista delegada del Gobierno, cuya incapacidad para desempeñar el cargo de tanta responsabilidad es el fiel reflejo de la conocida 'Teoría de Peter', que se aplica a los inútiles que alcanzan su máximo grado de incompetencia cuando alcanzan la cúspide que no merecen por capacidad.

Su gran ventaja es que cuenta como cobertura a su incompetencia con el melifluo presidente de la Ciudad, tan complaciente como pasivo, en los grupos que se dicen progresistas de la oposición en la Asamblea, con la obsesión de "Voxfobia" inoculada en todos sus discursos amanerados y unidireccionales, atrapados en el trauma electoral que los desbancó con el respaldo de los votos que otorgaron un buen número de ceutíes.

Conviene recordar que Vox es la consecuencia electoral de las políticas del PP, del PSOE, de MDyC y de Caballas, y el "castigo" en las urnas de los desatinos de todos ellos, como resultado de sus errores que la ciudadanía no perdonó. Todos ellos, para desacreditar a Vox recurren a idéntico mensaje: son un peligro para la convivencia.

¿Y acaso no es un peligro para la convivencia y la seguridad en nuestras calles esa banda de malhechores convertidos en pirómanos de coches y contenedores? ¿No es más bochornoso que el número 2 del grupo socialista en la Asamblea, el ínclito Juan Gutiérrez, se alarme por estas delictivas conductas y diga a sus compañeros de TRACE que no suban al Príncipe si no hay protección policial? Pero, mi querido amigo, si allí presume el PSOE de tener una buena bolsa de votos, si es su zona de "confort" electoral, si la delegada del Gobierno es de tu partido, si sois "compañeros del alma, compañeros", ¿de qué te quejas o de qué te sorprendes?

El balance de 450 contenedores calcinados en 2019, 150 en el último trimestre del año pasado y 50 en lo que llevamos de año, es absolutamente intolerable, alarmante, y la demostración que tenemos un desgobierno socialista de bochorno. Se pierden en acusar una y otra vez a Vox de "atentar" a la convivencia en Ceuta, ¿ y no se dan cuenta que, a este paso de "kale berroka" vamos a convertir o, mejor, van a convertir a Ceuta en una ciudad inhabitable, por la pasividad de unos, la tolerancia de otros y la inutilidad de la mayoría?

Estamos en una estrategia ideológica de centralizarlo todo en Vox como la impresentable intervención de ese diputado de MDyC, Mebroud quien saltándose el orden del día (con el mutismo del presidente de la Asamblea que ni está ni se le espera), se permitió provocar descaradamente a Vox diciendo que a esta formación política solo le queda "traer la pistola y disparar al techo como Tejero". Este muchachito con deseos de protagonismo fue el mismo que se aventura a decir en redes sociales las mayores tonterías sin confirmación  alguna y, encima tiene aires de "ser alguien". Más le valdría preocuparse por la ruina en las naves del Tarajal que seguro que le afecta más que el 23-F del 81 cuando él seguro que era muy jovencito y ni se acuerda de lo que sucedió.

Convocar ahora la Junta Local de Seguridad es una actuación a destiempo, extemporánea y cortina de humo de la delegada del Gobierno, cuando hay zonas de la ciudad que algunos dicen que no hay que estigmatizar (aquí solo se estigmatiza a Vox, que parece la consigna), como El Principe, Loma Colmenar, Arcos Quebrados que más parecen reductos antisistema, porque la izquierda radical ha puesto de moda con la revuelta "rapera" estas conductas de violencia callejera sin justificación. Y este comportamiento, en otros tiempos propio de la izquierda "abertzale" se ha instalado en Ceuta, ojalá que no sea para quedarse, porque antes deberían dimitir de sus cargos unos cuantos que viven obsesionados con Vox, y encima, tratan de imbuirnos un pensamiento obsesivo para ellos que nos quieren trasladar como la mayor perversión de la historia. No olviden que una cosa es lo que intentamos y otra la que logramos.

En los que ostentan cargos y cargas, está que Ceuta sea una ciudad de convivencia o de pillaje, extorsión, amenazas e inseguridad ciudadana. Pónganse manos a la obra y déjense de más estupideces ideológicas de vía estrecha. En política se está para gestionar y no para sestear, para trabajar y no para "chupar", para procurar el interés general y no para "sacar la barriga" o colocar a amigos y familiares con el uso y abuso de poder. Estamos viviendo y padeciendo una situación insostenible: adopten soluciones de una vez por todas.