CCOO y CSIF han renitido tanto a la Gerencia del Hospital Universitario como a la Dirección Territorial un escrito en el que se les recuerda la obligación por parte del INGESA de proteger la salud de sus trabajadores de conformidad con lo establecido en el art.14 de la Ley 3/1995, de 08 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales, donde establece que: "Los trabajadores tienen derecho a una protección eficaz en materia de seguridad y salud en el trabajo. Este deber de protección constituye, igualmente, un deber de las administraciones publicas respecto al personal de su servicio".

Es por ello que ambas organizaciones sindicales exigen que "a la mayor brevedad" se proceda a la vacunación "inmediata" de todos los trabajadores, "tanto sanitarios como no sanitarios (excepto los que expresamente muestren su negativa a ser vacunados)". "En la misma medida, al personal que presta servicio en los centros de AP y AE que no siendo personal propio del INGESA prestan diversos servicios en estos centros (personal de limpieza, seguridad, climatización, cafetería, etcétera)", recuerdan.

"Se constata  que a la fecha, hay gran parte del personal que presta sus servicios tanto en el Hospital Universitario como en Atención Primaria que continúan esperando recibir la primera dosis de vacuna de COVID-19, además de desconocer la previsión de fechas para su posible vacunación. El personal mencionado incluye trabajadores con atención constante y directa a usuarios".

Los sindicatos ponene en duda, además, la inclusión del personal temporal en la estrategia de vacunación, así como su aplicación al personal que ha cambiado de servicio durante el proceso. "De no obtener respuesta  a nuestra demanda, no se descartan adoptar otras medidas", han aseverado.