Tanto desde la Consejería de Medio Ambiente y Servicios Urbanos como desde TRAGSA no han cesado en pedir a la ciudadanía civismo para no tirar escombros y enseres que convierten la ciudad en un vertedero. Sin embargo, siguen siendo muchas las personas que optan por sacar a la calle, a ‘desecampados’ o a cualquier vía pública, lo que no quieren en sus casas, en lugar de avisar al correspondiente servicio y que pasen a recogerlo de manera ordenada y limpia.  

Esta situación ha llevado a la Consejería, mediante la encomienda de gestión a TRAGSA, a tener que proceder a la limpieza integral y retirada de escombros y enseres en la zona trasera de la antigua prisión de Los Rosales, una de las zonas más perjudicadas por la basura. Se ha tratado de una actuación de adecentamiento de gran magnitud que se ha desarrollado a lo largo de la última semana en esta zona en la que se producen vertidos ilegales, con un importante impacto medioambiental.

Actuación que ha costado a las arcas públicas un valor de 65.000 euros, gastados a consecuencia de un nulo civismo, como ha podido comprobarse en el material recogido. En cuanto al tipo de residuo, a través de estas tareas se han retirado 7.200 kilos de madera, colchones y basuras; 200 de neumáticos; 530.560 de escombros; y 5.300 de residuos férricos. En total: 543.260 kilos.