Falta de material, la necesidad de crear un cuarto centro de salud, la escasez de recursos humanos... Estos son algunos de los asuntos que ha abordado Ángel Lara, secretario general de la Federación de Sanidad de CCOO y presidente de la Junta de Personal del Ingesa en Ceuta, en esta entrevista para Ceuta Ahora (¡Puedes verla de manera íntegra en el vídeo!).

El sindicalista analiza cómo está la situación sanitaria en estos momentos en la ciudad, además de cómo ha sido la gestión sanitaria por parte del Ingesa respecto a la pandemia del COVID-19. “Llevamos años denunciando la problemática que tenemos en Ceuta respecto a la falta de profesionales sanitarios, lo que implica un ratio más elevado”, ha detallado Lara, quien explica cómo de darse una situación de rebrote o de contagiarse el propio personal sanitario como ha pasado en la península, Ceuta se enfrentaría a un gran problema.

“Los recursos humanos es el recurso más escaso que tenemos en Ceuta así que es hora de exigírselo al Ministerio de Sanidad”, ha incidido Lara en este sentido. “Estamos a la cola del sistema en personal sanitario; si la incidencia llega a ser grave quién atenderá a la población, porque desde la península no va a venir nadie”, ha lamentado Lara, recordando que los ceutíes no pueden ser tratados “como ciudadanos de segunda”.

Atención Primaria

Otro de los problemas a los que se ha visto abocada la población a consecuencia de la pandemia es el modo de proceder en los centros de salud: servicios cerrados, atención telefónica predominante... “En principio esto estaba justificado para que no se agrupara mucha gente en los centros de salud, pero el estado de alarma ya pasó y siguen limitando mucho la atención primaria”, ha denunciado Lara.

CCOO se hace eco de las quejas de los pacientes, a los que se les hace difícil, reclaman, contactar con los centros de salud “porque siempre comunican o no son atendidos”. “Y el usuario tiene toda la razón porque la administración ha puesto en marcha una serie de medidas para las que no estamos preparado; hace falta una inversión estructural como sería una centralita preparada, las adecuadas sustituciones, un cambio tecnológico... Y nada de esto se ha tenido en cuenta”. “Estos cambios requieren una inversión por parte del Ingesa, pero se puso de manera atropellada. Los que queda claro es que los fallos en el sistema de trabajo no son culpa ni de los profesionales ni de los usuarios, sino de los directores que no hacen nada por depurar y por invertir en un sistema nuevo”, ha concluido Lara.