La consejera de Sanidad y Servicios Sociales, Nabila Benzina, ha visitado hoy las obras de ampliación del cementerio de Sidi Embarek, donde se está construyendo un total de 329 nuevas tumbas. De estas, 56 estarán habilitadas a finales de este mes.

Los trabajos, declarados de emergencia debido a las complicaciones surgidas en la parcela inicialmente prevista —donde se localizaron antiguos artefactos explosivos que impidieron continuar con el proyecto—, cuentan con un presupuesto de 1.492.200 euros. Se espera que las obras concluyan en julio, aunque la totalidad de los enterramientos estará lista para su uso en mayo.

La intervención ha requerido la demolición de antiguos almacenes y el acondicionamiento de una parcela de 1.200 metros cuadrados, incluyendo la urbanización y la dotación de servicios básicos como agua, saneamiento y alumbrado. Además, se ha previsto la adecuación de un espacio anexo de 600 metros cuadrados para la futura construcción de otros 200 enterramientos.

Durante la visita, la consejera estuvo acompañada por la directora general de Sanidad, Rebeca Benarroch, el director general de Infraestructuras y Desarrollo Sostenible, Walid Ahmed, y técnicos de la Consejería de Fomento, Medio Ambiente y Servicios Urbanos. La obra está siendo ejecutada por la empresa Dragados.