Lunes, 08 de Septiembre de 2025

Actualizada Lunes, 08 de Septiembre de 2025 a las 03:36:18 horas

Paula M. García
Domingo, 01 de Diciembre de 2024

De cuando el poder político interfiere en los juzgados

Los dichos de la abuela encierran la sabiduría popular: "Del cielo a la tierra no hay nada oculto".El tiempo y los hechos son los que demuestran quien vale la pena y quien no. Y en efecto, no hay nada oculto entre el cielo y la tierra que no salga a la luz.

 

El foco mediático de la actualidad política ha situado las filtraciones de correos en perjuicio del novio de la presidenta de Madrid, Díaz Ayuso como una fórmula mafiosa de comportamiento torticero para denigrar a la única política del Partido Popular que hace verdadera oposición a Pedro Sánchez. Una situación que ha llevado al que fuera líder de los socialistas madrileños, Juan Lobato a poner ante el juez que investiga las posibles filtraciones del Fiscal General del Estado (ahí es nada) y sus presuntos vínculos con Moncloa y el presidente Sánchez, sus dispositivos electrónicos y documentación que llevó al notario. Un órdago que ha desestabilizado muchos escenarios y donde ha salido a la palestra una "vendida" periodista al poder  sanchista: Ángeles Rubio, exdirectora de El Plural (medio de izquierdas al servicio socialista), ex jefa de prensa de Zapatero y tertuliana de la Sexta, -que publicó las filtraciones que quería Moncloa en El Plural-, con marchamo más que significativo del servicio del poder monclovita como testaferros de insidias y manipulaciones, donde fue corresponsal de la Sexta en Ucrania un espía ruso y donde la tal Angeles Rubio publicó el "bulo" de que el juez Peinado que sigue la causa contra los negocios de Begoña Gómez, tenía dos DNI y por tanto, era un delincuente con esos fraudes que sólo existieron en su "contrastada" forma de ejercer el periodismo torticero y servil. Como resultado de sus "hazañas" periodísticas y, en absoluto independientes del poder, ha sido designada miembro del Consejo de Administración de TVE con un sueldo de 105.000 euros sin contar dietas por desplazamiento o manutención. O sea, los favores pagados.

 

Y como por dinero baila el perro, en Ceuta se ha dado un caso paradógico y muy similar: Gonzalo Testa el mayor fustigador de Javier Guerrero, con informaciones-opiniones como aberración de lo que en periodismo es la separación de géneros, (no debió ir a clase ese día donde se hablaba de la separación de los géneros periodísticos: entrevista, crónica, información, reportajes, opinión  y demás), depositario de múltiples filtraciones judiciales (convertido el Juzgado en un vergonzoso ámbito más propio de los "reality show" como "Sálvame" que de preservar la tutela judicial), ha encontrado, con el paso del tiempo, a un Juan Vivas benefactor vocacional de la izquierda mediática de este pueblo, colocándolo a dedo como director de la televisión pública a 79.000 euros de sueldo anual, algo que era impensable para este periodista "independiente", cuya designación fue calificada de "arbitraria" por Vox que llevaría al Juzgado el caso; un Gonzalo Testa que se prestó a hacer de "pantalla" contra la información que en su día publicó El Español, sobre la trama de dinero negro que ocultan las empresas de juego "on line" con informaciones positivas al Gobierno de Vivas y que, en el caso de Guerrero, ejerció con denodados esfuerzos denigrantes artículos demoledores, con crónicas "amañadas" a la intencionalidad política perseguida en ElDiario.es, donde su director, otro tertuliano de la Sexta, no es periodista titulado.

 

Si Ayuso es para Sánchez una piedra en el camino que desarbola su creciente corrupción, Javier Guerrero ha sido para Juan Vivas, otro tanto, desde que anunció que sacaba un partido político, Ceuta Avanza, desatendiendo la intentona del prócer local para que fuera su vicepresidente para así borrarlo como oponente electoral. En ese preciso momento, Guerrero debió cumplir todos los protocolos que meses después se dijo que incumplía en su relación con los MENAS y no era tan malo para el propio PSOE que envió para un pacto PSOE-Ceuta Avanza a un empresario de los subvencionados por Vivas en los juegos "on line" y que ahora se integra entre los que protestan contra los sindicatos para aglutinar más cursos de formación y, por tanto, muchas más subvenciones públicas de Juan Vivas, y que fue el enviado por Juan Gutiérrez en su día, para chantajear a Javier Guerrero, según la grabación que consta en tres "pendrives" en el Juzgado de Instrucción número 2 de Ceuta, donde la jueza  archivó varias causas en favor de Guerrero y obligó a su defensa a reiterados recursos ante la Audiencia Provincial.

 

A Juan Vivas le vino muy bien la desaparición-defenestración de la escena política de Javier Guerrero con su Ceuta Avanza, porque las encuestas anticipaban que haría un "roto" al bipartidismo local PP=PSOE y se convertiría en el juez de la composión del gobierno en Ceuta.¿Y qué hizo Vivas? Gripar desde la sombra su marcha ascendente con enorme apoyo social, utilizando las terminales mediáticas a su disposición como contrapeso: los 600.000 euros al diario El Faro de Ceuta (hay quien dice que no es tan sustanciosa esa cantidad por el buen periodismo que hacen sino por todo lo que ocultan del gobierno Vivas), no salen gratis, porque el reparto institucional de dinero para coartar-secuestrar la libertad de expresión alcanza los dos millones y medio de euros. Una dinámica vergonzósamente conocida, con la utilización "ad hoc" para un fin determinado. ¿En qué lugar que no sea Ceuta, se ha visto que los medios de comunicación nunca critiquen la acción de gobierno y sí lo hagan a la oposición? En Ceuta, los medios de "desinformación" no dejan de ser el llamado "cuarto poder", porque están sometidos a las subvenciones y cuando surge algún conflicto estéril es por los porcentajes de reparto de esa suculenta tarta con el dinero de todos nosotros. Así se explica que vayan a sede judicial con imputaciones sin pies ni cabeza, como denunciantes de la voz de su amo, elementos que dependen en su sustento diario del dinero público que tienen como sueldo.

 

Gonzalo Testa ya fue en su día, cuando el pacto PP-Vox estuvo vigente, objeto de deseo como fichaje para el gabinete de prensa por parte de Juan Vivas. El hilo conductor fue a través de dos consejeras, pero el veto del partido de Juan Sergio Redondo frustró la pretensión de Juan Vivas, como ya realizó en otra etapa precedente con otro periodista de izquierdas del Diario Sur con corresponsalía en Ceuta, quien le ponía a bajar de un burro al camaleónico Vivas que decidió acabar con tantas críticas con su fichaje institucional, evitando así tantos sobresaltos diarios.

 

El poder corrompido ha demostrado a través de la historia, que sus resortes son mal utilizados y sólo a su conveniencia para "domesticar" conciencias con conductas abyectas, tan despreciables y viles en extremo y capaces de un linchamiento inmisericorde. Así se explica que una turbia sombra oscurezca el desarrollo de tramas políticas urdidas como lapidación mediática al uso y abuso.

 

Idéntica estrategia de descrédito entre Ayuso y Guerrero, derivaron en posteriores recompensas económicas a sus "verdugos": Ángeles Rubio y Gonzalo Testa.

 

Cuando la libertad de expresión está secuestrada y la prostitución personal alcanza dimensiones de evidencias fehacientes, el Periodismo decae, la política envilece y sus protagonistas, no dejan de ser marionetas al socaire de intereses espurios.

 

Estas situaciones nos llevan a una reflexión: Si quieres ser feliz, no escuches todo lo que te dicen, no creas todo lo que ves y no digas todo lo que sabes. Sin embargo, recurro a un pasaje de Marcos 4:22 que dice: "Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de salir a la luz", porque es mucho más higiénico política y socialmente. No puede ocultarse tanto despilfarro de dinero público para saciar el ego de uno y amordazar la libertad de expresión, prostituyendo con subvenciones la profesión periodística considerada un contrapoder y anestesiando conciencias a nivel social.

 

Que una jueza desmonte las acusaciones de la fiscalía y la acusación particular contra Javier Guerrero con injurias que no son y calumnias que no existieron, -como conocimos esta última semana-, no es ya una mala interpretación jurídica del Derecho, sino un desastre de cómo se acusa, con qué base y hasta cuando seguirá esta situación donde la justicia también se ve muy comprometida. Todos nos abochornamos con tanta desidia y estrafalaria utilización de una presunta ofensa que no es tal. Increíble pero cierto. De momento, parece que el Poder Judicial mantiene el tipo. De ahí que se diga también que el tiempo es el juez inapelable.

 

La opinión de Ceuta Ahora se refleja únicamente en sus editoriales. La libertad de expresión, la libertad en general, es una máxima de filosofía de este medio que puede compartir o no las opiniones de sus articulistas

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