El Gobierno de Pedro Sánchez ha dejado a Ceuta fuera del reparto de los 2.543 guardias civiles en prácticas que se integrarán en distintas unidades de toda España a partir de este mes de octubre. Esta decisión llega en un contexto de creciente presión migratoria en las fronteras de Ceuta y Melilla, que recientemente han sufrido dos intentos de asalto masivo de inmigrantes ilegales organizados a través de redes sociales. Estos asaltos fueron contenidos gracias a la intervención de las autoridades marroquíes.

La Guardia Civil de Ceuta ha solicitado en repetidas ocasiones más medios humanos para reforzar la seguridad en las fronteras, pero el Ministerio del Interior ha decidido no incluir a Ceuta como destino para los nuevos agentes en prácticas de las academias de Valdemoro y Baeza.

Fuentes de la Guardia Civil en Ceuta califican esta decisión de "incomprensible", argumentando que la ciudad autónoma es un lugar ideal para formar a nuevos agentes debido a los desafíos específicos que plantea la gestión de la frontera. 

La Asociación Española de la Guardia Civil (AEGC) también ha expresado su preocupación, señalando que Ceuta está siendo "abandonada" ante la falta de personal. "La situación es insostenible", advierten, mientras continúan exigiendo soluciones inmediatas para paliar el déficit de agentes en la ciudad.