En una decisión inesperada, el Director General de la Guardia Civil, Leonardo Marcos, ha dimitido a escasos días de la implementación del servicio a turnos, dejando a los miembros de la institución sin avances significativos en el reconocimiento de la Profesión de Riesgo. 

La dimisión de Marcos se produce justo cuando, el próximo 4 de octubre, estaba previsto que presidiera una sesión ordinaria del Pleno del Consejo en la escuela de la Guardia Civil de Tráfico en Mérida. En su lugar, Mercedes González asumirá nuevamente el cargo, después de haberlo ocupado brevemente entre marzo y junio de 2023. La noticia ha sorprendido al colectivo y ha puesto de manifiesto una crisis de liderazgo en la Guardia Civil.

Desde Independientes de la Guardia Civil (IGC), se ha expresado preocupación por la situación. En palabras de su portavoz, Daniel Fernández, “nos causa una gran preocupación que, en un momento tan importante para la Guardia Civil, con un grupo de trabajo abierto en el Ministerio del Interior para el estudio del reconocimiento de la Profesión de Riesgo, y a pocos días de la implementación del servicio a turnos, nos quedemos sin el hasta ahora Director. Durante su mandato, Marcos ha mostrado una actitud soberbia y poco abierta al diálogo con los representantes de los guardias civiles.”

Muestra de ello, se produjo a raíz de los hechos acaecidos el pasado mes de febrero en Barbate, con el resultado de dos guardias civiles asesinados, “cuando las asociaciones profesionales solicitamos que en la Comisión de Riesgos Laborales del pasado 14 de mayo se abordase como punto de orden del día el análisis de los hechos ocurridos en Barbate, con la finalidad de que no se vuelvan a producir, y por parte de la DGGC se retiró de forma unilateral este punto del orden de día establecido, pese a la rotunda oposición de las asociaciones profesionales.”

La renuncia de Marcos ocurre en un contexto en el que la Guardia Civil ha estado en el centro de la atención mediática debido al aumento de agresiones a los agentes y a la creciente demanda de reconocimiento de su labor como Profesión de Riesgo. La llegada de Mercedes González como nueva directora genera expectativas mixtas. Daniel Fernández expresa cautela ante su regreso, cuestionando su compromiso con la Institución, especialmente al abandonar el cargo en un momento crucial.

Desde IGC, se espera que la nueva directora general gestione con el respeto y la eficacia que la Guardia Civil merece, para recuperar el prestigio y el reconocimiento que ha tenido a lo largo de sus 180 años de historia.