El general de brigada Fernando Rocha y Castilla, segundo jefe de la Comandancia General de Ceuta (COMGECEU), quien ha dedicado cuarenta años de su vida al servicio en el Ejército de Tierra, se prepara para pasar a la situación de reserva.

El próximo viernes 23 de agosto se celebrará una parada militar en su honor en el acuartelamiento González-Tablas, sede del Grupo de Regulares de Ceuta nº 54. El acto será presidido por el comandante general de Ceuta, Marcos Llago Navarro.

Durante sus cuatro décadas de carrera militar, ha ocupado distintos cargos de relevancia, incluyendo sus últimos dos años y cuatro meses como General Segundo Jefe de la Comandancia General de Ceuta. El General Rocha y Castilla ha sido una figura clave en la COMGECEU, contribuyendo significativamente a la operatividad y cohesión del cuerpo durante su mandato. Su liderazgo ha sido fundamental en la organización y coordinación de diversas operaciones y ejercicios militares en la región, destacándose por su dedicación y compromiso con las Fuerzas Armadas.

Nacido en Ceuta el 22 de octubre de 1963, Fernando Rocha ha desarrollado una extensa carrera militar que lo ha llevado por distintos destinos dentro y fuera de España. Su formación comenzó en 1984 en la Academia General Militar de Zaragoza, donde cursó estudios hasta 1989. Posteriormente, se especializó en la Academia de Infantería de Toledo, obteniendo diplomas en Mando de Unidades Paracaidistas y de Operaciones Especiales.

A lo largo de su carrera, el general Rocha ha estado destinado principalmente en Unidades Ligeras, destacando su servicio en Operaciones Especiales, la Guardia Real y Grupos de Regulares en las ciudades españolas del norte de África, donde ha forjado un vínculo profundo con la región. Durante sus más de 40 años de servicio, ha ascendido en la escala militar hasta alcanzar el rango de general de brigada.

La experiencia internacional del general Rocha es igualmente notable. Fue destinado en el Nato Rapid Deployable Corps Italy, en Solbiate Olona, Italia, una unidad multinacional de alta movilidad de la OTAN. Además, dirigió el Experimento Multinacional MNE-6 "Cultural Awareness", un proyecto liderado por España desde el Estado Mayor de la Defensa (EMAD). Rocha también ha participado en tres misiones en el extranjero: en Bosnia-Herzegovina como Monitor de la Unión Europea, en Afganistán bajo la bandera de la OTAN y en Líbano en misión de la ONU.

Su preparación académica incluye un diploma en Estado Mayor, y ha completado el Curso Internacional de Estudios Estratégicos en Brasil, lo que complementa su perfil con una sólida formación en estrategia militar. Además, habla con fluidez inglés e italiano, habilidades que han sido clave en su desempeño en misiones internacionales y colaboraciones multinacionales.

Su paso a la situación de reserva marca el fin de una distinguida carrera en el Ejército de Tierra, donde ha dejado una huella indeleble en todos aquellos que han tenido la oportunidad de servir bajo su mando. Deja tras de sí una carrera marcada por el honor, un profundo sentido del deber y la excelencia.

Casado y padre de tres hijos, Rocha se retira del servicio activo, pero sus contribuciones e influencia en el Ejército de Tierra español seguirán siendo recordadas por quienes tuvieron la oportunidad de servir bajo su mando. 

La parada militar del próximo 23 de agosto, no solo será una despedida formal, sino también un reconocimiento al sacrificio y a la entrega de un militar ejemplar.