La Capitanía Marítima de Ceuta ha anunciado la desactivación del Plan Marítimo Nacional tras gestionar el vertido de fuel oil provocado por el buque Tony Stark. Este incidente ha llevado a la implementación de medidas cautelares que incluyen la retención del buque hasta que el armador ingrese una garantía de 120.000 euros, de los cuales 100.000 euros son por la contaminación causada y 20.000 euros adicionales para cubrir los gastos de las labores realizadas por los medios navales y aéreos de Salvamento Marítimo.

El buque Tony Stark no podrá reanudar su travesía hasta que se realice el ingreso de la mencionada garantía. Además, la Capitanía Marítima ha exigido al capitán del buque la entrega de un informe detallado que explique las causas del accidente, las medidas correctoras que se adoptarán para evitar episodios similares en el futuro, y la identificación de un domicilio en España para futuras notificaciones.

En la tarde del 18 de julio saltaban todas las alarmas en Ceuta cuando en una operación de bunkering se producía un vertido de fuel oíl de una tonelada, aproximadamente, por parte del buque Tony Stark. Así, inmediatamente se procedió por parte del Capitán Marítimo de Ceuta a activar el Plan Marítimo Nacional en situación 1, que significa que existía riesgo de que el vertido llegase a la costa.

Este vertido ha sido controlado gracias a las rápidas y efectivas acciones de los equipos de Salvamento Marítimo, que desplegaron medios navales y aéreos para mitigar los efectos del derrame. Un incidente como este deja clara la importancia de la pronta respuesta y colaboración entre las autoridades marítimas y los servicios de emergencia para proteger el entorno marino y garantizar que los responsables asuman las consecuencias de sus acciones.