Los empleados de Caixabank han iniciado movilizaciones por la presión laboral a la que están sometidos a causa de una ''política cortoplacista'' de la entidad, que deriva en un aumento de bajas en las plantillas por patologías psicológicas y en un deterioro en el servicio que se presta a los clientes, según los sindicatos.

 En las protestas, afirman que se incrementa la presión que sufren por las exigencias comerciales de la dirección en la consecución de objetivos que multiplica las bajas por ansiedad y depresión.  Los sindicatos UGT, CCOO y el sindicato de empleados de Caixabank (SECB), que agrupan al 90% de la plantilla.  

Un total de 152.000 personas trabajadoras de Banca, Ahorro y Cooperativas de Crédito, entre ellos los empleados de Ceuta, están llamadas a participar a la huelga parcial de 2 horas convocada por SECB-FINE, CCOO y UGT para el próximo lunes 26 de febrero, en horario de 8:00 a 10:00.

Tras las manifestaciones en Madrid, Barcelona, Sevilla y Valencia, el próximo lunes las plantillas del sector, 80.000 de Banca, 55.000 de Ahorro y 17.000 de Cooperativas de Crédito, están convocadas a un paro de 2 horas para exigir a las entidades del sector financiero incrementos salariales acordes con los beneficios del sector y medidas de calado que mejoren un clima laboral cada vez más insostenible, en una escalada de movilizaciones que tendrá continuidad con la huelga de 24 horas convocada para el viernes 22 de marzo, fecha coincidente con la celebración de las Juntas de accionistas de CaixaBank y Banco Santander.

Desde SECB-FINE, CCOO y UGT califican esta huelga en el conjunto del sector como una movilización histórica, al no haberse producido nunca de forma simultánea en Banca, Ahorro y Cooperativas de Crédito.