Sábado, 20 de Septiembre de 2025

Actualizada Sábado, 20 de Septiembre de 2025 a las 13:05:01 horas

El barón de Brède
Sábado, 17 de Febrero de 2024

Dos mundos

Don Marlaska suma y sigue en la larga lista de desencuentros con la guardia civil, mientras en el Estrecho se da el encuentro de dos mundos: el de los buenos y los malos, el de los villanos y el de los agentes del orden, el de los ricos y el de los pobres.

 

Los asesinos de la planeadora son la consecuencia del choque de estos universos. Marruecos podría ser calificado de muchas formas, pero en su manera de funcionar se acerca a un narco estado, es el mayor productor de hachís del mundo y Europa es su mejor cliente. Para llegar a Europa desde Marruecos hay muchas opciones y rutas, cruzar el Estrecho utilizando narcolanchas una de ellas. Pero esta es la cara más visible, la más espectacular, la de las persecuciones, los desembarcos, las lanchas motoras y sin embargo a mí esto no me interesa, porque lo que verdaderamente me importa es lo que hay detrás: los beneficios de productores y distribuidores. Los de las lanchas por muchas cosas que tengan y por muchos bienes que atesoren no dejan de ser unos desgraciados muertos de hambre. Unos canallas de medio pelo que durarían un instante en este mundo si los grandes pestañean. A mí me preocupan los que tienen el poder para producir los narcóticos y sacarlos de Marruecos utilizando a familias y clanes del campo de Gibraltar. Son vecinos de un país feudal donde el poder del estado es omnímodo y dónde nada ni nadie mueve un pelo sin la aquiescencia del mujabarat y, por supuesto, de «Sa Majesté».

 

Y también me preocupan las personas que se lucran con este negocio al otro lado, sus ganancias deben ser de tal calibre que estoy convencido de que no se pueden esconder, que muchos de ellos son "gente bien", es decir, rostros conocidos. Y pensando en el dinero, que es la contrapartida y el producto del comercio de esta mercancía, barrunto que si el de la lancha no es más que un mero transportista y tiene para el lujo y la vida padre: ¿Qué no será la vida del productor en Marruecos? ¿Y del distribuidor en otros países como España, Francia, Holanda o Alemania? ¿Quién es ese vendedor final? Estoy seguro de que estos personajes emprenden muchos negocios y utilizan tapaderas para blanquear. Puede que negocios pujantes o tal vez no porque lo importante es sacar a la luz un dinero opaco aunque ello conlleve cierta pérdida ¿utilizarán muchos negocios y pequeños o pocos y grandes? y esto me conduce directamente al volumen de negocio necesario para que todo este dinero de las transacciones opacas salga a flote, las operaciones que hay que realizar, los préstamos y las inversiones asociadas al tráfico ilegal de sustancias estupefacientes. Me hace recapacitar en el entramado de contables, abogados y financieros y demás "titulados" que manejan la infraestructura societaria y de capital necesaria para lavar las grandes sumas de dinero en efectivo que se manejan en este negocio.

 


En Marruecos todo está claro, más tarde o más temprano habrá que pasar por el palacio real. El mismo al que obedece la policía, los servicios de información y el ejército. Sus servicios secretos son los mejores del mundo, se han infiltrado en el corazón de Europa, han espiado a diestro y siniestro en el parlamento europeo y, con ayuda de Israel, a los primeros ministros de Alemania, Francia y España ¿Qué información no estará en su poder para mover la política europea a su antojo? y ¿Qué no sabrá Hammouchi el director general de la Vigilancia del Territorio de Marruecos y líder del espionaje interior?


En España el gran público no sabemos mucho de quien o quienes tienen esta información, pero sí que acaba en el ministerio del interior, que es el encargado de proteger el estado de la libertad y los derechos y a sus autoridades, en cuya cabeza se sitúa un exmagistrado con un pasado y una vida personal complicada y que parece acorralado y sin muchas salidas. Está conectado directamente con el presidente del gobierno y ha colaborado con el gabinete en desmantelar la cúpula de la guardia civil y al grupo destinado a combatir este negocio, mientras permitía que un compañero de su gobierno colase de matute dos grandes bolsas de nylon de un avión procedente de Venezuela y, al mismo tiempo, mantenía información sobre los desmanes, fiestas con prostitutas y cocaína de sus colegas de escaño tito Berni, su trama Canaria y un diputado de Almería que, presuntamente, estaban relacionados por un mediador con un alto mando de la guardia civil.


Con estos mimbres salen estos cestos y es preocupante porque las víctimas siempre son los de abajo, siempre los mismos los que caen, mientras que los de guante blanco consideran gajes del oficio y se ponen morados con las ganancias.

 

En Ceuta sabemos mucho de esto porque estamos en la ruta del contrabando y conocemos de primera mano a los traficantes, son ídolos para la juventud del Príncipe, también están entre nosotros personajes que blanquean, porque llevan toda la vida con negocios a ambos lados de la frontera, sabemos del tráfico de mercancías por el Tarajal, del trasiego de divisas, de los abogados, de los bancos, etc. Sabemos lo que han vendido los concesionarios en vehículos de alta gama y las de electrónica, las tiendas de muebles, etc. Y vemos como la vida de lujo está entre nosotros, aunque no podría seguir escribiendo porque me metería en un lío por especular sobre propiedades, viviendas y construcciones de personas, de donde se alojan los hombres del orden y la ley, de las fiestas en el pueblo marinero, de los yates, de los viajes, del intercambio de cocaína por hachís, de la prisión, de las fortunas y de los afortunados y aunque todo esto sea tema de chismorreo de la calle, por hipocresía caballa disfrazada de prudencia, me lo quedo y desde mi atalaya sigo viendo el precioso espectáculo de dos mundos unidos por un estrecho de agua que los separa.

 

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