El Gobierno de la Ciudad ha rebajado sus expectativas sobre la municipalización del servicio de limpieza, del que ha sido adjudicataria Trace y cuyas funciones se han repartido entre otras empresas vinculadas a la administración, y lo ha fiado al dictamente de los informes técnico jurídicos.

El portavoz accidental del ejecutivo local, Alberto Gaitán, ha explicado que en un primer momento la Ciudad valoraba la posibilidad de la gestión directa, pero ha matizado que tienen que esperar a los informes y para después establecer una propuesta para su aprobación en el pleno de la Asamblea. 

"Se propondrá el pleno una vez vencido el contrato, para abordar y determinar si el sistema de gestión es directo o indirecto", ha dicho, tras reconocer que existe "un problema" con la limpieza en Ceuta y la "la disposición absoluta para su correción" por parte del equipo de gobierno.

Gaitán ha recordado que el ejecutivo apostaba por la gestión directa, con el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, a la cabeza  lo que generó un agrio cruce de reproches con el secretario general de los socialistas ceutíes, Juan Gutiérrez. Sin embargo, ha matizado que "todo está sometido a esta documentación", en un caso en el que también tendría que plantearse un período de transición.

El también consejero de Presidencia y Gobernación no ha querido dar fechas sobre cuándo se va a llevar esta cuestión a pleno, pero ha señalado "va a estar trabajando en lo que queda de este cuatrimestre" para poder presentar una propuesta a los diputados ceutíes. 

También ha planteado la rebicación de la base en el puerto, complementar los servicios con los medios disponibles (Tragsa, Brigadas Verdes y Obimace), el seguimiento permanente del trabajo y la realización de encuestas sobre la calidad del servicio entre la ciudadanía.