Hemos asistido a la fiesta del sacrificio, donde la Umma ha celebrado su Fiesta Grande o día del Aid al-Adha, como acción de gracias a Dios por salvar a Ismael, hijo de Abraham. Cordero, sacrificio y pecado están asociados simbólicamente, el cordero representa el fin del ayuno y la alianza con Dios y para los cristianos además la redención de Cristo. El cordero está presente en la celebración de la Pascua (Pesaj) en las tres grandes religiones monoteístas.

Religión, tradición y cultura se fusionan en el cordero y para los musulmanes en este día. La sangre correrá entre la pasividad y la sumisión de unos ciudadanos desilusionados y frustrados con la política y con los partidos políticos existentes porque con su resignación han permitido el liderazgo de un viejo dominante y sin escrúpulos que es esclavo de su propia obra y que ha establecido tal control sobre el sistema que las voces y preocupaciones no serán ni escuchadas ni atendidas.

En este contexto, los verdaderos "corderos" son los ciudadanos, que, en lugar de alzar la voz y participar activamente en el proceso político, optan por el silencio debido a la desconfianza, a la apatía o a la sensación de que su voz no cambiará nada. Como resultado, el Partido Popular en nuestra ciudad continúa operando según la propia agenda del búnker que lo dirige, sin objetivos y sin una verdadera rendición de cuentas hacia aquellos a los que dicen representar. Claro que con menos de un 20% del total del censo a su favor a muy pocos deben de dar explicaciones porque la gran mayoría o no ha participado o ha elegido otra opción política.

El PP de Ceuta es una organización triste, cerrada y tenebrosa de la que se benefician los del búnker y también los más advenedizos y rastreros. Por eso veremos más de lo mismo, avaricia, el síntoma más evidente del egoísmo, la competencia, la acumulación de riqueza y el individualismo. Avaricia que se manifiesta por la desigualdad económica y social y por la priorización de los intereses económicos sobre los valores humanos y sociales. Avaricia igual que en Sodoma dónde los efectos del querer estaban relacionados con la ganancia y el apego a la propiedad y las riquezas que son signo de falta de compasión.

Cuando los ciudadanos permanecen en silencio y no expresan sus inquietudes o demandas, se corre el riesgo de perpetuar un sistema político disfuncional y alejado de sus necesidades. Por temor o por hastío, los individuos débiles o vulnerables están en peligro y se ven obligados a permanecer callados o sumisos ante la maldad, la oscuridad y la corrupción. El cordero, en este sentido simbólico, representa al inocente, vulnerable e indefenso. Aquellos que son víctimas de una situación opresiva o peligrosa y que no pueden (o no se les permite) hablar o defenderse. El cordero implica la idea de sacrificio y la subyugación de los más débiles ante fuerzas más poderosas. El cordero, en definitiva, ha nacido para servir de banquete.