Yolanda Díaz se ha empeñado en que su invento de "Sumar" es la solución a la izquierda del "Sanchismo" y ha protagonizado cabriolas políticas de todo tipo. En Ceuta, se iba a encomendar, inicialmente, a la "progre" Fátima Hamed, aquélla que llevó a Valencia integrándola en el Pacto del Turia. Sin más bagaje político que demostrar una fobia enfermiza contra Vox que aún tiene inoculada por su última manifestación sobre la presencia institucional de la "ultraderecha" en la Asamblea de Ceuta, esta "demócrata" de boquilla, que ni respeta los resultados de las urnas ni a los votantes de una formación política (ella que se dirige a la mitad de la población ceutí y luego dice con descaro que hay dos Ceutas), este peculiar personaje definido por alguno de sus conocidos como que "ella baila con quien venga" y que tenía una lista de exigencia para Vivas, con etiqueta de antisemita, en principio fue la primera opción de Yolanda Díaz para "Sumar" en Ceuta. Su acercamiento y negociaciones con Vivas, la defenestraron como "progre", descubriendo Yolanda Díaz que no era lo que pensaba, sino una acomodaticia a sus propios intereses.

Ramón Rodríguez fue una opción válida para Podemos, por estructura de izquierdas y sentido ideológico fiable, muy al contrario que su antecesora, pero la "guerra" interna entre Podemos y "Sumar", llevó a este invento de Yoli a decantarse primero por la búsqueda de un "independiente" (término que en política es inexistente cuando se integra en un partido político), y una vez descartada Fátima Hamed "bucear" en Ceuta Ya, con fracasado resultado y recurriendo como "salvavidas" a una supuesta Izquierda Unida con un tal Nepomuceno muy vinculado a otro "invento" en la otra orilla: el Partido Andalusí del ceutí Driss Mohamed, que se presentó el 23-M en Algeciras sin obtener representación, formación inspirada en el humanismo islámico. Su precedente estuvo en 2021 en otro experimento: IU y Plataforma Civil Sebta que apoyaban a la Comunidad Musulmana y criticaron la gestión de la Fiesta del Sacrificio. Izquierda Unidad no logró respaldo alguno  cuando en el verano de 2021 nadie se adhirió a la concentración que convocaron con sus socios políticos, la Plataforma Sebta y PRUME (partido de inspiración islámica y promarroquí). La presencia de tres militantes de IU, dos de Sebta y uno de PRUME, demuestra el fracaso "Por un Eid Al Adha ancestral".

Izquierda Unida en Ceuta, parece que quiere cambiar la chaqueta vieja desteñida por una chaqueta nueva con "Sumar", pero en realidad lo que lleva es un gorrito con cascabeles que le convierte en patético remedo de lo que fue y ya no es, ni por asomo. ¿Qué diría Julio Anguita si viera a Nepomuceno navegar como lo hace por IU? Yolanda Díaz es que ni siquiera lo conoce de nada, porque si no, diría como Miguel Hernández: "Me revuelve los huevos del alma".

A escasas horas del cierre del plazo de candidaturas, "Sumar" en Ceuta, dando bandazos, y encomendándose con desorientación al primero que encuentra, conecta con una Izquierda Unida que sólo tiene la denominación de orígen, sin más estructura ni recursos, encabezada por alguien que llevará el "sumatorio" de Yolanda Díaz a la hoguera, anticipándose a la Fiesta de San Juan para culminar este patético esperpento político con olor a chamusquina. Sumar certificará en Ceuta, si se presenta bajo la cobertura -que es un decir-, de Izquierda Unida, el mayor fracaso que podría obtener en este experimento que le puede explotar a Yolanda Díaz en sus narices y acabar con sus "besiños" y sonrisa falaz.