La estrategia de Sumar a nivel nacional es la fórmula de "purgar" a Podemos, formación política a la que Yolanda Díaz trata de llevar a la insignificancia política cuando no a la desaparición. Su brazo ejecutor es Josep Vendrell ese definido "hombre tranquilo para negociar" a quien parece que no le tiembla el pulso para "cortar cabezas" políticas.

En Ceuta, el miércoles por la noche de la pasada semana, Fátima Hamed recibió la llamada telefónica que la descartaba como lideresa para encabezar "Sumar" en Ceuta por su acercamiento, en cuestión de pactos, con el Partido Popular. A las 24 horas, ella que es muy lista, hizo público que su formación no se presentaría a las Elecciones Generales integrada en "Sumar”. Y además, dejaba libertad de voto a los suyos, demostrando el nulo agradecimiento a Yolanda Díaz que la catapultó a nivel nacional.

Desde Madrid, el jueves telefonean a Ramón Rodríguez sus compañeros de Podemos, para encabezar "Sumar", dado que es la única estructura para formar parte activa de la misma, instándole a que buscara responsable legal ante la Junta Electoral y candidatos al Senado. El paso de las horas es frenético al igual que la intensa actividad de Yolanda Díaz de hacer rodar cabezas y hete aquí, que el pasado domingo, la secretaria de Organización de Podemos, Lilith Verstrynge y secretaria de Estado para la Agenda 2030 indica a Ramón Rodríguez que las cosas van mal para Ceuta reconociéndole que de nada ha valido su lucha por los movimientos sociales con cuatro años de iniciativas como la creación del Premio "Vivencias" de reconocimiento a mujeres, Jornadas de Migraciones, el Día Internacional de la Poesía y la lucha contra la discriminación racial..."Sumar" impone candidatos, no negocia. Este miércoles, Podemos desde Madrid tiene conocimiento que Yolanda Díaz no quiere a nadie de Podemos Ceuta y es a mediodía de este jueves, cuando deciden buscar un "independiente", como si este concepto no desapareciera en el momento que ese independiente se integra en una formación política de la que ha de asumir sus preceptos e ideología. Aludir a la independencia como ir por libre en un partido político, donde impera la disciplina más estricta, es una entelequia, creíble solo para no iniciados.

La búsqueda de "independientes" la orienta ahora "Sumar" hacia los denominados partidos localistas, también conocidos como partidos de ultraizquierda "fake", de corte musulmán; una vez liquidada Fátima Hamed y su MDyC, solo queda Ceuta Ya, por descarte. El plazo de estas coaliciones acaba el lunes. De manera que ha de darse prisa “Sumar” para hacer valer este concepto con el que se define.

La limpieza de todo lo que "huela" a Podemos por parte de "Sumar" es una fórmula de "pogromo político" al estilo estalinista, de la que es artífice de los "besiños" en un claro ejemplo de cómo paga la izquierda ideológica los servicios prestados de sus fieles, un método que antes esta misma ideología reservaba a la derecha. Unas prácticas donde el "Irono" Montero de Ceuta es Ramón Rodríguez y la práctica de ir descabezando a Podemos a siniestra, el método de una Yolanda Díaz, que en Ceuta tienen poquísimo que hacer son "Sumar" y, en cualquier caso, su concurrencia electoral es "sumar" una anticipada derrota, pese a su búsqueda de un espacio donde no cabe este experimento que ha puesto en marcha erigiéndose con su pelo rubio y melena al aire en la nueva "Robespierre", como una verdadera "incombustible" que no tiene remilgos en llevar de número 2 al diplomático trotskista defensor del "procés", Agustín Santos Maraver, negacionista de la Resolución de Naciones Unidas en el Sáhara, siendo ella defensora de los Derechos Humanos, aunque la misma Yolanda Díaz agradeció en el Parlamento Europeo a Marruecos el trato que dispensa a España, en el colmo de la incongruencia ideológica y política.

Los "besiños" de esta gallega ex de Comisiones Obreras, que traicionó al BNG en su tierra, y lo ha hecho después a Pablo Iglesias, además de "acuchillar" ahora políticamente a su compañera del Consejo de Ministros y en Podemos, Irene Montero, son dardos envenenados. Se cree la salvadora de España y con tantos cadáveres en el camino, puede que los "zombis" políticos acaben con ella, porque lo peor para un político es aglutinar cadáveres en el armario y ella, Yolanda Díaz, está haciendo una recolecta inmisericorde de enemigos. Tiempo al tiempo. El caso de Ceuta es sólo una raya en el agua.