El mensaje subliminal despeja muchas incógnitas y más en política. Defenestrada Fátima Hamed como candidata de Yolanda Díaz, por su interesado acercamiento al Partido Popular a causa de los preapalabrados pactos locales de gobierno, la apuesta de la formación que lidera la actual vicepresidenta del Gobierno de Pedro Sánchez, parece que se ha inclinado o lo va a hacer en breve, según todos los pronunciamientos favorables, por Ramón Rodríguez, líder de Podemos en Ceuta.

No ha gustado en absoluto a la líder de esa "nueva forma de hacer política" que Fátima Hamed juegue a diestra y siniestra para poner en juego sus propios intereses en Ceuta y a nivel nacional. Su proyección en aquellos días de rosas en el Pacto del Turia, han decaído profundamente, como ya sucedió hace tiempo con su admirado Aberchán, el corrupto condenado a dos años de inhabilitación que desapareció de la foto, como también ahora lo han hecho con su formación política, incursa en el presunto fraude de los escandalosos votos por correo en Melilla.

La "operación descartes" para el "movimiento Sumar" han sido tres formaciones que, en un principio, parecían llamadas a "sumarse": Coalición por Melilla, Adelante Andalucía y el MDyC de Fátima Hamed.

A falta de confirmación oficial, todo apunta a que será el docente, escritor, columnista y político, Ramón Rodríguez Casaubón, quien lidere la candidatura al Congreso del "movimiento Sumar" en Ceuta, que aún habrá de determinar, quienes serán sus dos compañeros que le acompañarán al Senado con los correspondientes suplentes a las dos Cámaras.

Tras el famoso Pacto del Turia, donde Podemos fue marginado en cuanto a representación por Yolanda Díaz, ya se informó desde Ceuta a la formación morada que la participación de Fátima Hamed no era la viva representación de ninguna izquierda, porque ella, en su concepción personal, nada tiene de izquierda y menos de extrema izquierda. Fátima Hamed va de "progresista" pero no tiene el menor inconveniente de aliarse con Juan Vivas y olvidar su reiterado sainete de "desgobierno" que tanto le aplicó al longevo político en la última legislatura y que le ha caracterizado en múltiples comunicados de prensa e intervenciones en Pleno. Para pactar intereses ya no hay desgobierno del PP de Vivas. Puro cinismo político.

Fátima Hamed demuestra que los intereses personales están por encima de las ideologías y de los principios, como se ha ratificado en sus encuentros de pacto con representantes del Partido Popular en el Parador Hotel La Muralla, recientemente.

Ese acercamiento a la "extrema derecha o derecha extrema" como califica a la formación de Feijóo, Pedro Sánchez, ha sido su tumba como política de "izquierdas" para encajar en el proyecto de Yolanda Díaz. Fátima Hamed, ya "no suma" y como resta, ha sido relevada, aunque en un principio se le propuso encabezar la candidatura por Murcia y después por alguna otra circunscripción, aunque todo quedó en agua de borrajas. De manera que, 24 horas después de recibir la comunicación de descarte desde Madrid -como siempre hace cuando olfatea algo-, hizo pública su renuncia para quedar con la dignidad a salvo, pero serán los hechos a corto-medio plazo, los que determinen su desafección ideológica de "izquierdas" que ella vende, porque "Sumar" no quiere saber nada de quien entabla conversaciones de pacto con el Partido Popular.

Antes de adquirir notoriedad nacional, Fátima Hamed se ha diluido como un azucarillo por sus vaivenes políticos, "jugando" a izquierda y derecha, sin el menor recato. Ahora, desubicada, ha tenido el atrevimiento, para redondear la faena de proclamar a los cuatro vientos que deja libertad de voto a su militancia y votantes; ella que estaba en "Sumar" y que al ver que ya no "suma", le da lo mismo ocho que ochenta. La líder del MDyC acaba de escribir su epitafio político y a nivel nacional, Yolanda Díaz la ha captado con rapidez. Tanta ambición rompe el saco de los objetivos. Y ese comportamiento no "suma".

Por otra parte, parece que el "movimiento Sumar" no está en Ceuta por la labor de atender el llamamiento del PSOE de "la unión de los progresistas ceutíes" en estas Elecciones Generales, porque tampoco fue de su interés esa unión en los últimos comicios locales con Podemos. El sentido de la conveniencia nunca es a gusto de todos.