El supuesto fraude electoral de Coalición por Melilla el partido de Aberchán, el gran amigo de Fátima Hamed y Mohamed Alí, ha roto los apoyos de quienes formaron el Acuerdo del Turia, esos cachorros de Yolanda Díaz, la de "Sumar", ¿qué? Más corrupción, más pucherazo, más "nueva política" de chanchullos.

En Ceuta, ante este gran escándalo nacional, los "amigos" de Aberchan guardan sospechoso silencio, ellos que son adalides de la legalidad y descalifican con tanta facilidad a quienes les parece. Aberchán, condenado a 2 años por corrupción fue su paradigma para MDyC y para Caballas. Ahora cuando la cruda realidad les ha dado de bruces con la "bomba" de la corrupción más tercermundista, rudimentaria y propia de república bananera, los localistas de MDyC y Ceuta Ya, guardan silencio. Ni valoran ni se posicionan, ha sido un misil de descrédito en la línea de flotación de sus compañeros del alma y de coaliciones. Una vergüenza democrática de proporciones siderales que lleva al desmarque a Compromís, Más País, y a otras alianzas ideológicas como a Colau. Dicen que la hemeroteca es un lastre del pasado y los reproches de ahora son la consecuencia de asociaciones interesadas.

El movimiento promarroquí en Melilla (pagando vuelos y hoteles a melillenses que vivían fuera para que ganasen las elecciones), ha sido un escándalo que ha publicado El Debate. Una trama donde se publica que la policía sospecha que Marruecos financió con 2 millones de euros la compra de votos mediante el método "Hawala".

El intercambio de dinero por papeletas es una fórmula nada novedosa, porque hay gentes pululando en los alrededores de los colegios electorales en la jornada de las votaciones, que la policía deberñia vigilar con agentes de paisano para detener a los delincuentes que atentan contra la democracia.

La red clandestina que se desplegó en Melilla desató gran sospecha por los 11.000 votos por correo que se robaron para enviarlos desde distintos lugares de la península. Una forma subrepticia de injerencia de Marruecos en la política española y que demuestra el por qué ni Ceuta ni Melilla tendrán jamás capacidad legislativa como promueve en nuestra ciudad Ceuta Ya (antes Caballas), por una cuestión de Estado y para que Marruecos no interfiera en este ámbito. ¿A qué juega Ceuta Ya? ¿A que Ceuta sea Comunidad Autónoma plena y Marruecos interfiera en la política ceutí?

Estas actuaciones tercermundistas y tan burdas son propias de un país como Marruecos, que utiliza procedimientos de república bananera para interferir el desarrollo electoral con sentido democrático. Un sistema que desconocen en Marruecos. Mientras, Fátima Hamed y Mohamed Mustafa guardan el silencio de los corderos con Melilla hecha un polvorín de corrupción con el foco puesto en el partido de sus amigos... Aberchán y Coalición por Melilla.