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Ricardo Espíritu
Domingo, 29 de Enero de 2023

Impostaciones

Todavía no se han apagado los ecos de la propuesta de Vox en Castilla y León de protocolizar la información a las embarazadas que indican su interés en liquidar el feto que llevan.

 

Estoy perdido, lo confieso. Parecía que Vox iba a sostenella y no enmendalla, por aquello de que era una cuestión que estaba contenida en los pactos que llevaron al Partido Popular de Fernández Mañueco a gobernar en Castilla y León. Pero no. 

 

Todo ha sido un quiero y no puedo. Al igual que en Andalucía, donde se pactaron varios temas para que se aprobaran los presupuestos de 2019, y el PP no cumplió ninguno. Y Vox calló. Sólo fingió indignación cuando se venían directas las elecciones de junio de 2022.

 

Pero lo que me ha llamado poderosamente la atención es la actuación del Partido Socialista. Primero impostando rasgarse las vestiduras por el retroceso de derechos de las mujeres que supone proporcionar información a las gestantes. Por otro lado, ya desde ese gobierno de España, pidiendo airadamente explicaciones porque una actuación como la propuesta por Gacía-Gallardo (Vicepresidente de la Junta de Comunidades de Castilla y León) invade competencias estatales.

 

Desde estas líneas ya lo he dicho en otras ocasiones. Al PSOE le importa un pimiento la lucha por los derechos de las mujeres cuando ello conlleva una postura contraria a sus consignas. Consignas, y no principios, pues a lo largo de sus más de cien años de existencia el PSOE ha sido paradigma de la célebre frase de Groucho Marx: ”Estos son mis principios. Y si no le gustan, tengo otros”. Aún resuena ese “no dormiría tranquilo” compartiendo gobierno con Podemos.

 

Tampoco ha demostrado interés este Gobierno en que no se invadan sus competencias, de lo que da muestra por ejemplo la servil actitud que mantiene con la Generalitat de Cataluña, que sigue imponiendo su voluntad sin ningún tipo de oposición por parte del Consejo de Ministros.

 

Porque, bien pensado, la vida puede defenderse Constitución en mano. Ya saben, Articulo 15: “Todos tienen derecho a la vida”. Salvo que pretendas que un feto es sólo un compendio de células que no tienen vida propia, al igual que es una pierna, o tu propio bazo. Y nadie va voluntariamente al cirujano para que le extirpen el bazo. Probablemente el cirujano derivaría al paciente a un psiquiatra.

 

Por eso todavía resulta más impostada la desproporcionada reacción de los diferentes ministros, que corrieron todos a los medios a repetir, casi palabra por palabra, la consigna impartida por el Goebbels socialista en ejercicio. Y cacarearon al unísono lo de defender “los derechos de las mujeres”. Pero no dijeron abiertamente que están defendiendo el “derecho al aborto”, derecho que –a día de hoy- no está reconocido en esta piel de toro.

 

La reacción impostada ha producido el efecto deseado. El Partido Popular se ha alineado abiertamente con las tesis del gobierno y del PSOE y ha preferido no enfangase en un asunto que le es incómodo. Porque posicionarse en defensa de la vida les hace parecer menos centristas, menos progres. Porque el PP tampoco es el paradigma de poseer principios.

 

Pero una vez más, el potente Ministerio de la Propaganda se ha salido con la suya, y ha dejado a un líder de la oposición balbuciendo excusas para que no le llamen fascista, cosa que hacen todos los días esté por medio la defensa de la vida o no.

 

Así que, excluido que al PSOE le importen lo más mínimo los “derechos de las mujeres”, lo que está en juego en esto es que cuando se trata de que las personas estén informadas para tomar las decisiones que corresponda, al Partido no le gusta. 

 

Y fíjate, que en las cajetillas de tabaco te informan obligatoriamente de las consecuencias de fumar, decisión que tú eres libre de tomar, y que tú ya conoces sin que te impida seguir comprando a precio de oro cada cajetilla. O la cantidad de documentos que tienes que firmar cuando te van a extraer una muela. Pero sin embargo todo eso resulta superfluo cuando se trata de liquidar una vida.

 

Porque, a lo mejor, lo que temen los abortistas es que las mujeres, convenientemente informadas, sean capaces de elegir libremente. Y eso es lo que parece ir contra el Derecho.

 

Y es que el discurso abortista sigue necesitando de una propaganda machacona, no fuera a ser que detrás de tanto impostar se descubra la impostura.

 

La opinión de Ceuta Ahora se refleja únicamente en sus editoriales. La libertad de expresión, la libertad en general, es una máxima de filosofía de este medio que puede compartir o no las opiniones de sus articulistas

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