La violencia en cualquiera de sus formas, psíquica, física, sexual o familiar, es criticable, condenable y rechazable desde cualquier punto de vista, a nivel individual y colectivo. 

Las víctimas, mujeres, niños, ancianos y hombres, todos en general tenemos la obligación de proteger a los más débiles, cada uno aportando dentro de sus posibilidades las medidas y actitudes necesarias para evitar que la violencia sea vista como algo inevitable en nuestra sociedad. 

La violencia de género, mujeres asesinadas, violadas y maltratadas, algo que vemos un día si y otro también, debe de terminar, se deben adoptar las medidas por parte de las Administraciones, endureciendo las penas para los autores y responsables de estos delitos.

Tenemos que acabar con los cobardes que abusando de su fuerza someten a mujeres y niños a estos abusos que llegan incluso a poner fin a sus vidas. Que terrible vivir bajo el imperio del terror en tu propia familia, en tu propia casa.

Esta demostrado que las campañas de concienciacion no son suficientes y las Leyes como la del SÍ ES SÍ favorecen estos abusos.

Endurecer las penas, vigilancia de los presuntos maltratadores y abusadores y atención prioritaria a las denuncias por malos tratos.

La mujer merece todo el respeto por parte de todos y no hay nada que justifique un maltrato.