El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha vuelto a defender la necesidad de que la exigencia de visado para acceder a Ceuta desde Marruecos, que viene aplicándose desde la reapertura de la frontera del Tarajal el pasado 17 de mayo, se mantenga de manera permanente. Así lo ha trasladado al ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel Albares, con el que se ha reunido para analizar la situación fronteriza.

Para argumentar la postura del Gobierno de la Ciudad, que es la que ha mantenido especialmente desde el episodio del 17 de mayo de 2021, el presidente ha ofrecido algunos datos, que reflejan el impacto positivo que dicha medida ha tenido en ámbitos muy sensibles, como la reducción en un 80 % del flujo de personas por el paso fronterizo, que ha pasado de unos 25.000 a un máximo de 3.500 diarios, “que ha evitado colapsos de tráfico en la N-352, que antes eran frecuentes”; los partos se han reducido un 50 % y la asistencia en urgencias ha bajado a la mitad.

Además, en enseñanza obligatoria el descenso ha sido del 10 % y el número de incidencias que, debido a la presión migratoria, se producía en el puerto y en sus inmediaciones, se ha reducido en un 90 %. Por otra parte, el crecimiento de afiliación a la Seguridad Social, utilizando la misma comparativa (frontera con y sin visado) ha sido del 4 %, muy similar al que ha habido en el conjunto de España.

“Por tanto, argumentos más que suficientes para sostener la posición que defiende el Gobierno de la Ciudad, que sigue instalado en la lealtad institucional, responsabilidad y sentido de Estado cuando se trata de abordar cuestiones que afectan al interés general y que repercuten de manera directa en la estabilidad, seguridad y prosperidad de nuestra ciudad. Y hoy lo vuelvo a confirmar porque son asuntos que marcarán el destino de nuestra ciudad para la próxima década”.