La Guardia Civil ha dado un severo golpe al narcotráfico al aprehender un alijo 257 kilogramos de hachís que iban ocultos en un vehículo belga durante la pasada madrugada de este miércoles en la zona de control aduanero de la frontera del Tarajal. Se trata de la mayor incautación de droga en ese punto fronterizo desde la apertura del paso en mayo pasado.

Los hechos, según han apuntado las fuentes de la Guardia Civil, se produjeron pasadas las 3.30 horas de la madrugada. La labor que desarrolla la vigilancia privada desplegada en la frontera, a través de Eulen Seguridad, ha resultado "fundamental" para el hallazgo de la droga, han asegurado desde el instituto armado.

Complementaria y subordinada a la Guardia Civil en la zona fiscal, la seguridad privada, realiza conjuntamente controles bajo la supervisión de la Benemérita y durante esa madrugada los vigilantes detectaron la droga oculta en la baca del vehículo belga en el registro. De inmediato se alertó a los agentes de la Guardia Civil quienes se hicieron cargo del operativo y procedieron a la detención de los dos ocupantes tras leerles sus derechos.

Se trata de dos ciudadanos de nacionalidad belga que fueron arrestados para ser puestos a disposición judicial y la droga intervenida trasladada al depósito del área de Sanidad Exterior de la Delegación del Gobierno.