La consejera de Hacienda, Economía y Función Pública, Kissy Chandiramani, ha defendido el texto de la Ordenanza Reguladora de actividades que lleva a cabo la Consejería de Educación y Cultura, una necesidad que el departamento que dirige el consejero Carlos Rontomé había planteado para una mejor ordenación de los servicios que se prestan en el ámbito cultural, entre ellos la expedición de entradas, el uso del Teatro Auditorio del Revellín o los espectáculos organizados en las Murallas Reales o en las Fiestas Patronales.

La miembro del Gobierno ceutí se ha comprometido a que la Ciudad analizará las aportaciones planteadas por los grupos políticos de cara a la aprobación definitiva de una ordenanza que fija unos precios “más bajos” que los que actualmente se venían aplicando, ha reiterado Chandiramani.

Igualmente, el documento contempla un apartado específico para bonificaciones, en este caso los abonos que engloban varias actuaciones y en los que los precios se fijarán aplicando un descuento adicional del 15 % sobre la suma de los precios de cada actividad.

La aprobación inicial del texto ha contado con 17 votos a favor y 7 abstenciones. A partir de ahora, se continuará con la tramitación legalmente establecida mediante la publicación del acuerdo en el BOCCE para la presentación de reclamaciones.