Dieciocho inmigrantes subsaharianos fallecieron este viernes por la mañana, en la parte marroquí de la frontera con Melilla a consecuencia de los violentos altercados con las fuerzas marroquíes previos al asalto masivo al perímetro de la ciudad autónoma realizado a primeras horas de ayeyr, que se saldó con la entrada de 133 irregulares, la mayoría sudaneses.

En un comunicado del Ministerio del Interior marroquí, fechado ayer, se ofrecieron las cifras en las que también figuran 140 heridos entre sus policías, militares y gendarmes al sufrir lesiones, cinco con carácter grave, durante los graves disturbios para dispersar a la multitud que se aproximaba a la valla.

En la parte española se registraron otros 106 heridos entre la Guardia Civil y los irregulares (49 fueron miembros de la Benemérita), así como varios vehículos del Instituto Armado dañados.

Según la información oficial marroquí difundida ayer, los 'sin papeles' habrían muerto en una avalancha anterior al asalto fronterizo, cuando los agentes marroquíes intentaron dispersar a los casi 2.000 inmigrantes que se aproximaban a la doble valla. Centenares de subsaharianos, en las carreras, acabaron cayendo a una vaguada donde al menos seis habrían muerto por aplastamiento o asfixia. 

El grupo asaltante, muy organizado, estaba originariamente compuesto por unas 2.000 personas, muchas sudaneses que desde hace días deambulaban por las inmediaciones del monte Gurugú buscando la mejor ocasión para forzar la entrada a Melilla