Cómo todos los meses, grupos de Fieles ceutíes suben a las cercanías de la Torre Aranguren a rezar el Rosario el primer sábado de cada mes, en el altar situados en las proximidades del fortín neomedieval.

Este grupo de fieles denuncian las continuas profanaciones y daños que sufre el altar, que consiste en una escalinata, una imagen de la Virgen María y una Cruz. 

El mes pasado, en mayo, los fieles describieron que rompieron la Cruz. El grupo de fieles procedieron a adecentar limpiando el lugar y plantar cactus en el macetero. En la visita celebrada este sábado, con el objeto de rezar y reponer la Cruz, en esta ocasión ha aparecido profanada la imagen de la Virgen Maria y los maceteros rotos. 

Estos grupos de fieles denuncian los continuos ataques que está sufriendo el altar y lamenta la reiteración de estos actos que atenta contra los sentimientos religiosos.