Pedro Sánchez se ha convertido en un peligro público y social. Su propia aberrante conducta así lo demuestra; la penúltima fechoría es la "debilidad" que exhibe -como indica La Razón- y que alarma a Zarzuela y Policía: sus socios en el Gobierno le exigen que la nueva Ley de secretos oficiales desclasifique documentos de Don Juan Carlos y de la "guerra sucia" contra ETA, o sea el GAL y la cal viva. Dos cuestiones que llevan a Podemos, los separatistas y Bildu a poner sus exigencias como moneda de cambio al mayor trilero político que ha tenido la democracia española.

Ese politicastro que representa al partido con el que el PP en Ceuta no siente ningún salpullido por sus prácticas torticeras de querer destruir España y tan alejado de los valores constitucionales como se demostró en el anticonstitucional Estado de Alarma por partida doble, donde evitó la acción parlamentaria en el Congreso de los partidos y nos confinó como cobayas atentando a nuestros derechos fundamentales. Tal atrocidad solo fue llevada hasta los altos tribunales por Vox, ese partido al que demonizan quienes marcan etiquetas y lineas rojas impartiendo dotrina ficticia de valores que desconocen, pero que se ven salpicados por sus tropelías totalitarias.

Un último episodio nos sitúa en algo gravísimo: Filtran documentos del 11-M en Madrid que implica al PSOE (nada extraño bajo el sol), culpa al expresidente socialista Rodríguez Zapatero y salpica a Pedro Sánchez. Alvise Pérez desclasifica información que señala a Francia y Marruecos (vaya, los del Tratado de Buena Vecindad, tal reclamado por los partido promarroquíes), como responsables de los terribles atentados de 2004. Unos atentados en los que murieron 193 personas y que cambiaron el rumbo político de España, dando un vuelco electoral con juego sucio incluido -algo que sabe hacer muy bien el PSOE, como ya lo intentó también en las últimas elecciones a la Comunidad de Madrid con los sobres de balas y el cuchillo "ensangrentado"-, demostración de las prácticas que se gastan para retorcer la realidad.

José Luis Rodríguez Zapatero, el compinche de Sánchez es otro peligro para la política y la sociedad española, con sus vínculos con Venezuela y sus oscuros trapicheros. El analista político e influencer, Alvise ha destapado un caso en redes sociales que compromete al PSOE y salpica directamente a Sánchez. Se ha hecho pública la filtración contra la corrupción del mayor escándalo de audios y documentos constatando el sistema podrido con el PSOE de gran protagonista. Como siempre: ¿O nos vamos a olvidar de que "Chirac personalmente suguirió a Aznar que era el momento de ceder a Marruecos Ceuta y Melilla y el conjunto de islotes reivindicados", como reflejan los documentos ahora conocidos?

Este es el PSOE de Sánchez y Juan Gutiérrez, el mismo que quiere ganar las elecciones en Ceuta con esta postura promarroquí bestial, con apoyos de gentes que tienen las manos manchadas de sangre como Bildu y con siniestras maniobras para favorecer el ansia anexionista de Marruecos, una afrenta para todos los "caballas" y un PP silenciado, mudo, complaciente, sin coraje y entregado a la traición a esta tierra y a España. Enmedio de esta situación Vox pide investigar los empadronamientos fraudulentos en Ceuta y Melilla, iniciando una reforma legislativa para atajar la invasión pacífica de esa quinta columna que nos llega como el Caballo de Troya para dinamitar nuestra convivencia con sigilo y colapsar nuestros servicios públicos, demandando cuantiosas ayudas sociales a cargo de nuestros impuestos y viviendas sociales.

El nuevo modelo fronterizo que se prepara ha de ir con la vista puesta en esta anómala situación de marroquinización de Ceuta: el cierre de la frontera ha puesto al descubierto el fraude de empadronamientos y la asistencia sanitaria a marroquíes. La diputada de Vox en el Congreso -esa a la que el desaprensivo y lenguaraz secretario general de los socialistas ceutíes, Juan Gutiérrez, dice que no se gana su sueldo-, ha puesto al descubierto que, por un lado el Ayuntamiento, a quien corresponde vigilar este tema (según la ley reguladora de Bases de Régimen local) viene a demostrar la incapacidad del Gobierno Vivas que lleva a Ceuta a una situación insostenible ("mi querido presidente"),  mientras el Gobierno de la nación ("mi querido presidente" ¿verdad Juan Vivas?), no cercena el creciente número de españoles que ni tienen intención alguna con vincularse con España ni intención de integrarse en nuestra sociedad.

Este fin de semana, el ausente Sánchez del acto central del Dia de las Fuerzas Armadas y de la final de la Champions en Paris con un equipo español en la final (el Real Madrid), priorizó un mitin en Dos Hermanas (Sevilla) en apoyo de su candidato Espadas, imputado por corrupción, atreviéndose a aludir a la corrupción del PP y haciéndolo precisamente en Andalucía, donde su partido recibió la mayor condena de la democracia con dos expresidentes de la Junta implicados (Chaves y Griñán), asi como la exministra socialista Magdalena Álvarez, entre los 19 condenados por los ERES. Todos ellos por el desvío de fondos públicos -como acostumbran los socialistas con descaro y poniendo etiquetas a los demás sin rubor-, en un absoluto descontrol de las subvenciones para asignarlas de manera arbitraria, viéndose privados un importante número de desempleados de las ayudas, que habían de gestionar el partido de los 140 años de historia y que lleva en su nomenclatura la palabra Obrero. Esta semana "El Debate" ha publicado un artículo muy clarificador: "Archipiélago PSOE, todos los casos de corrupción que acorralan a Pedro Sánchez", aludiendo a siete años de tramas, investigaciones y condenas.

Y encima, su hombre en Ceuta, Juan Gutiérrez, compañero del actual director del SEPE, José Simón, el mudo exdiputado en el Congreso que tiene el récord de no haber presentado ni una sola propuesta en su etapa parlamentaria, tiene el atrevimiento de señalar a Teresa López del Vox, diciendo que no justifica el sueldo de 6.000 euros que percibe. Hombre, desde luego no lo justifica con las ataduras que tiene Gutiérrez en TRACE con el "lobby" empresarial, ni mucho menos con prácticas personales y políticas del pasado y del presente. Esta ciudad chiquitita, marinera y mediterránea como dice el compañero de coalición, Juan Vivas, hace que todos se conozcan. Y el pasado personal de algunos es un lastre. Ese pasado ni se borra ni se barre, aunque sea TRACE el concesionario de la limpieza. A veces, el pasado huele que apesta. ¿A qué huele este PSOE?

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