Subirse al madroño. Bajarse de las nubes. Menudo mareo. Es un ir y venir. Deberá de tener récords y bono de descuentos.  De no ser así, nuestros impuestos no llegan para pagar tal cantidad de viajes.

A toda regla corresponde una excepción. Si nadie es profeta en su tierra. Si te toca el destino con la mano de la elección, y ocurre que tu gran pasión es el fútbol. Si de Madrid al cielo. Si tu equipo favorito viste de blanco. 

Por varias razones reconozco mérito. Descubrió que la población ceutí podía tener agua en sus hogares, pasadas las dos de la tarde. Alcalde zahorí. Con tal descubrimiento, aplaudo bien fuerte. 

Ahora bien, si era para suministrarla sin poder beberla, a su precio de lujo.

Es el alcalde más viajero. Va de Ceuta a Madrid, y viceversa, con más facilidad que dar soluciones.

A esas dos razones apuntadas, añado una tercera. La principal: ostentar un título de honor digno del cuadro que existía, a la entrada, del colegio San Agustín. 

Ni sé por dónde anda el susodicho cuadro, ni sé por dónde anda ahora ese alcalde de Ceuta, que quiso vivir pobre, y morir libre. 

Se han dedicado a desplazar al hombre santo en su vida, irrepetible, en su condición política de principios. Una cosa es cierta. 

No fueron capaces de soportar el peso de su mirada en su primera ubicación, frente por frente, a la puerta principal del nuevo y feo ayuntamiento. Ese parche pegado al edificio clásico y majestuoso.

 Ha estado más tiempo hablando de las carencias de Ceuta. Que se van a suprimir sobre la marcha, con un Plan Marshall, ante la nueva relación de América con Sánchez. Por lo visto. Paciencia…

Vivir en Ceuta se ha hecho insoportable. No obstante, vamos a ponerla guapa. Más adornos, más estéticas, sin contenidos. 

 Qué concretar sobre el leiv motiv de esa importante llamada. Los problemas de los menores que no son nuestros, pero que, al menos de momento, de los momentos, su cariñosa familia debe seguir siendo Ceuta. Hasta que los flecos, cabos,  sueltos…

Después de más de 20 años, desde las nubes, habla de lo que pudo ser nuestra tierra, pero no es. 

Es todo un dictador. Un gran dictador. El mayor dictador. Es su tercera cualidad y más relevante. La ausencia del ejercicio de la crítica le hace hablar con palabras de humos. Encima, tan convencido.

La pluma más intelectual que viajaba a bordo del barco de papel, fue la del jefe de máquina de buques, con vocación de periodista y abogado, José Luis Chaves.

En Ceuta hablar de autonomía era similar, por aquellos años, a discutir sobre el sexo de los ángeles. Creo que ese tema estaba más claro. Encargo a Chaves el desarrollo semanal, con entrevistas, opiniones, etcétera Su trabajo fue excepcional.  

La mayor manifestación de Ceuta se produce. Los políticos se movilizaron como nunca antes jamás. Las consecuencias de la manifestación fueron motivo suficiente para lograr un estatuto de mínimos y de máximos.

 A mínimas competencias, se correspondieron sueldazos, cargos para nombrar en serie, puestos de confianza y desconfianza.

Total, una comunidad de bolsillo. Con dineros y dineros que nunca llegaron a los servicios de calidad e infraestructuras de Ceuta. Con posibilidades y oportunidades de trabajo. Parando la máquina del motor de la caravana del goteo constante del éxodo. 

 No se cae de la nube, pero se ve atrapado en la falta de coherencia con la realidad. Es como si hubiera llegado ayer al ayuntamiento.  Es resumir, más de 20 años en 24 horas. Es el arte al más puro estilo. 

Encima, de hundidos social y económicamente. De estar arruinados, nos permitimos el lujo de negar la entrada a los barcos de guerra rusos. Claro, que puede que para tal medida exista, como ocurre siempre, una explicación razonable. Un curioso overbooking.

 Nuestro puerto estaba con el cartel de completo. Con tantos transatlánticos atracados. Con el Parque a tope, por medusas y otras causas, a dónde los iban a 'aparcar', sin que les pusieran el famoso cartón típico de nuestro peculiar turismo. 

De lo qué se queja, ahora y precisamente, el que acaba de subirse al madroño, sin bajarse de las nubes. 

Pena que el asunto era otro. Tendrá que pegar la vuelta a toda máquina. Señores presidente del Gobierno de la Nación (PSOE), y alcalde de Ceuta (PP), Pedro Sánchez, y Juan Vivas, respectivamente, no es de recibo el trato. Gracias por vendernos la burra del dorado mañana, cuando hoy se nos condena a vernos obligados a marchar de casa.  Resulta imposible estar en paz, con unos menores y unos mayores, que no nos corresponden.