Varios MENA agreden a los vigilantes de La Esperanza durante el desayuno y CSIF carga contra el descontrol

Una pelea desatada esta mañana acaba con sillas y mesas por el aire, algunos de los responsables se trasladan a Punta Blanca

Interior del Centro de La Esperanza / Foto Archivo

Una pelea al estilo carcelero se ha producido en el centro de La Esperanza esta mañana durante el desayuno cuando un grupo de menores se han enzarzado en una discusión que ha derivado en consecuencias violentas, incluso, contra el personal de la vigilancia privada que acudió a intentar sofocar el tumulto y que también sufrieron los efectos de la violencia.

Los responsables serán trasladados a Punta Blanca, pero el sindicato CSIF denuncia que estos hechos son una constante, que el centro de La Esperanza está masificado, que hay poco personal para el número de menores existente y que es habitual la entrada de los MENA bajo los efectos de las drogas. Algo que se suele silenciar -reconoce el sindicato- "por el exceso de celo del personal", pero que pese al conocimiento del área de Menores correspondiente, no se hace nada por controlar, ni intervenir.

El CSIF lo ha denunciado finalmente a través de un comunicado de prensa que reproducimos.

Comunicado de CSIF:

"Lo venimos advirtiendo desde hace años, se lo hemos trasladado en varias ocasiones a los responsables de la Consejería y de Recursos Humanos, sin que hagan caso. Tememos que sea necesario que ocurra una desgracia para que se tomen medidas. La cantidad desproporcionada de menores, las reducciones de personal, la incesante contratación de personal eventual y la carencia de medios, hacen que trabajar en el Centro de Realojo (La Esperanza) se haya convertido en un auténtico riesgo para la seguridad del personal y de los menores.

Un centro que ha pasado a triplicar el número de menores internados en apenas 3 años, mientras veían que el número de efectivos para atenderlos se reducía paulatinamente sin que la administración tuviera la más mínima intención de incorporar personal. Prueba de ello es la ausencia de convocatorias de plazas de nueva creación en las ofertas de empleo de los últimos años a pesar de nuestras insistencias por incrementar las plantillas en el Área de Menores.

Desde CSIF hemos conocido que en la mañana de hoy se ha producido una grave agresión contra el personal de Seguridad del Centro. La situación producida durante el desayuno, ha tenido como consecuencia una pelea en la que han intervenido varios adolescentes, llegando a agredir al personal con mesas y sillas.

No es la primera vez que se producen altercados con agresiones a personal o a otros internos en los centros de menores. Sin embargo, los medios de comunicación no se hacen eco de los sucesos por el exceso de celo del propio personal.

Agresiones, vejaciones, violencia física y verbal contra el personal, faltas de respeto, acoso a trabajadores, la llegada de adolescentes de madrugada en estado de embriaguez (por el consumo de alcohol y estupefacientes) a los que hay que permitirles el acceso al centro cuando lleguen, las alteraciones del orden y enfrentamientos con el personal que los adolescentes que han consumido drogas producen en el Centro, etc. son el pan nuestro de cada día para los trabajadores del Centro, sin que desde el Gobierno de la Ciudad se tomen medidas para frenar esta escalada.

No hay espacio, ni medios, ni personal, para contener la situación, mientras el Gobierno de la Ciudad mira para otro lado preocupado únicamente de la dotación presupuestaria que le toca en los Presupuestos Generales del Estado.

Soluciones chapuceras como la contratación de una empresa externa que carece de control por parte de la administración y en las propias instalaciones del centro, solo han contribuido a que la situación esté aún más descontrolada. Esta empresa, que tan solo cuenta con apenas un mes y medio de actividad en nuestra Ciudad ya ha visto como se producían graves altercados en sus instalaciones, necesitando incluso la intervención del propio personal del Centro La Esperanza en varias ocasiones, y utilizando personal de seguridad y otros medios materiales, a pesar de acoger a un número reducido y cuidadosamente elegido de adolescentes.

Desde CSIF queremos destacar la importante labor que realizan todos los trabajadores de los Centros de Menores a pesar de la escasez de medios y de la falta de respeto de un Gobierno que solo se preocupa por su imagen en la calle, y obvia por completo lo que sucede en los centros que están bajo su responsabilidad. No vamos a mirar para otro lado mientras nuestros compañeros padecen estas situaciones y pondremos todos nuestros esfuerzos en conseguir que se reconozca su labor y se tomen medidas para evitar que sucesos como el de hoy se repitan en el futuro."