Tenía guardado en el cajón una cuartilla con los apuntes de una reflexión que quizá cuando mas tranquilo estuviera, me pondría a darle forma en una columna de opinión. Al principio pensaba decir "de mayor quiero ser como tú", como diciendo ante el desmadre total que me encuentro por la calle todos los días y no digamos al volante pero la reflexión era mejor a eso de "estoy trabajando".

La gente parece que confunde el ocio con el trabajo y no sabe que en el ocio también se trabaja pero eso es difícil de entender para el resto del personal. He podido comprobar lo difícil que es salir con la cámara a cuestas y la libreta para cubrir cualquier evento en el ocio nocturno o de paso también el ocio diurno como las actuaciones en lugares de copas o celebraciones donde se encuentra parte de los invitados y asistentes con la euforia correspondiente acorde al sitio para disfrutar de una vela, pero no calculan que estamos aparte de los que se encuentran en la hostelería otros trabajado es para cubrir una noticia y hacer de moda perfecta la cobertura gráfica y escrita de cualquier celebración.

En una de estas actuaciones me tocó delante de mí una persona en su entusiasmo euforia y delirio general por la actuación, mientras yo estaba haciendo el reportaje y tomando nota de la interpretación de las piezas musicales, como la actuación iba con una gran motivación la cosa se iba calentando más cuando ya empezaba el amigo a decir "oye sírveme una copa" y uno aguantando el tipo pensando, como te coja a la salida vas a ver donde va salir la copita de turno.

Han pasado dos años, porque luego llegó la pandemia y las ausencias de todo disfrute general porque a todos nos gusta disfrutas y nos ponemos el himno del "todos queremos más" y mira por donde van llegando los reencuentros y los lugares donde trabaja cada uno, porque si algo tiene Ceuta es que es grande de acogedora pero es muy pequeña para al final de todo encontrarnos.

Me tocó asistir de rebote a otra actividad donde saqué el móvil para hacer fotos a la misma y escucho "caballero no puede pasar" y le dije anda tu eras el de la actuación … porque como me iba a olvidar y me dijo : "Es que estoy trabajando" y le solté, "aquel día yo también estaba trabajando y … no veas la que me distes".

Ya se dio cuenta que los encontronazos profesionales salen a flote y me decía, siga haciendo fotos y con esos gestos que hacemos los latinos con los hombros me fui del lugar, yo me quedé mas a gusto que un guarro en un charco y recordé una despedida de un jefe hace la tira de años cuando al amparo de las copas, comenzaron a contar los "secretos"  que quizá el hombre no sabía a lo que los más fríos de cabeza dijeron al día siguiente, este se estaba riendo y que no vuelva porque aquí todos con las copitas pero el estaba mas tieso y sereno que una vela, por eso mi reflexión final siempre fue de encontrar en sus trabajos en plan santito a los que disfrutan con la exaltación eufórica como si les fuera la vida con el "gol de Zarra o de Iniesta" y uno está allí bebiendo zumito y te va a dar lecciones cuando le toca currar a el.